La lluvia se ha convertido en un aliado de Rafael Nadal, que el miércoles comenzó un partido con el argentino Diego Schwartman con el que comenzó perdiendo su primer set y se encontraba 3-2 abajo. Schwartman comenzó atacando, con sus golpes planos tanto de revés como de derecha haciendo mucho daño, tomando la iniciativa y haciendo que Rafa sufriera más de lo normal. Con la primera interrupción por la lluvia el español pudo meditar y salir con otro aire a la pista, recuperando el break perdido y logrando un 5-3 arriba en el momento en el que el partido se suspendió. Hoy en la reanudación ya iba preparado, ya había recibido los consejos de su equipo y cuando entró en juego volvió a mostrar su carácter dominador, dicen que a ésto ayudó el día seco y caluroso, el caso es que su bola corría más y obligaba a Diego a perseguir la pelota de un lado a otro para poder devolverla. Hay que decir que el argentino en todo momento dio la cara y lo intentó, incluso en el juego final salvó varias bolas de partido y obligó al mallorquín a tirar de experiencia para finalizar.
Ahora toca olvidar y descansar para las semifinales, donde de nuevo se va a encontrar a un compatriota de Diego, Juan Martín del Potro, viejo conocido que seguro lo hará sudar.
En féminas ya no nos queda representante, pues Muguruza tras su espectacular victoria contra Sharapova hoy se ha encontrado con una Simona Halep que ha bordado el juego, imponiéndose con rotundidad a Garbiñe por 6.1 6.4. En ningún momento la española ha sabido responder a la oleada de golpes que le enviaba Simona, que se movía de forma increible por el fondo de la pista soltando el brazo con gran contundencia.
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