La final esperada Djokovic, nuevo número uno, contra Nadal. Son los jugadores más en forma del momento y así lo han demostrado en sus respectivas semifinales, el serbio venciendo al francés Tsonga y el español al escocés Murray, ambos partidos en cuatro sets.
Djokovic fue capaz de aguantar el saque y el resto del francés, encaminando el partido y poniendo sobre la pista su calidad y experiencia, al final venció 7-6, 6-2, 6-7 y 6-3.
Por su parte Nadal venció a Murray en un partido en el que tuvo que remontar tras perder un primer set en el el británico puso sobre la mesa que era candidato a la final, además de la esperanza de los británicos. Sin embargo, ante el gran juego del escocés Rafa opuso su gran cabeza, supo esperar, consciente de que Murray no podría mantener durante mucho tiempo ese nivel de juego, y a continuación comenzó a jugar, a ganar puntos de los que dan ánimos, a llevar la iniciativa y eso se tradujo en el triunfo final que le permitía pasar a la final y por tanto enfrentarse de nuevo a su bestia negra de este año, el serbio Djokovic, pero ahora siendo el número dos y habiendo ganado un gran slam, lo importante será ganar el torneo y lo demás vendrá solo.
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