El partido comenzó mal para Rafa que pronto se vio 3-0 en contra en el primer set, sin embargo, todos le conocemos y sabemos que no hay que desesperar, que sabe sobreponerse a las adversidades y así logró remontar ganando por 7-5. La segunda manga aún comenzándola bien logrando un break de ventaja vio como Federer le empataba el partido y llegaban al tie-break, en el que de nuevo el suizo tuvo una laguna que fue aprovechada por el mallorquín adjundicándosela por 7-6. Y cuando todo parecía que iba a ir sobre ruedas surgió el gran maestro Federer que no solo logró sobreponerse a un break en contra sino que supo terminar el set con un juego magnífico con bolas escoradas de revés, golpes ganadores de derecha y dejadas imposibles para Nadal, sin olvidar claro su gran saque, imponiéndose por 7-5. Había partido, si Roger seguía así posiblemente empataría y todo se resolvería en el quinto; sin embargo, allí estaba Nadal sobreponiéndose y realizando el juego que todos le pedíamos, pasando como un ciclón sobre el helvético y llevándose el set por 6-1, con lo que Rafa conseguía lo impensable al comienzo del torneo.
El español ha empatado los triunfos de Borg, seis Roland Garros, ha luchado contra todo, contra el público que siempre ha apoyado a suss oponente y contra si mismo, cuando veía que le costaba mucho ganar y las dudas le rondaban, les ha demostrado a todos porque es el rey de la tierra y porque es el número uno.
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