Agonía de España, un partido donde casi todo valía para pasar se ha complicado con un fallo defensivo y una estatua del portero, que viene siendo lo habitual.
Dominó y tuvo casi siempre el balón, pero no creó peligro ni situaciones de gol, mientras Marruecos agazapada esperaba el momento para crear pánico en la defensa española. El empate final gracias al VAR deja poca confianza en el recorrido de esta selección, ni siquiera el empate de Portugal y pasar primero de grupo cruzándonos con una Rusia que no da miedo nos da confianza.
El partido de ayer se repetirá seguro, pues los equipos saben que para jugar con España hay que cerrarse atrás e impedir que el dominio de paso a la creación y con ella la posición de gol, mucho ha de cambiar el juego o bien tener preparadas alternativas que nos den mejor resultado y, por favor, la defensa que no de más oportunidades cuando atacan. Esperemos esta fase de grupo sea tan un debut de la próxima campeona.
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