Que la tierra es la superficie idónea de Rafa, está claro; que el español tiene una mente clara y puede afrontar grandes contratiempos, también. Tras su retirada en Miami a causa del golpe de calor, Nadal no ha cejado en su empeño de recuperar su forma física, su juego y su ambición. Y el mejor sitio para hacerlo es la tierra de Montecarlo, torneo que le ha dado grandes satisfacciones. Su victoria de cuartos ante un jugador tan difícil como Wawrinka, indica con claridad que el manacorí está en la línea. Ahora tendrá un hueso difícil de roer, Murray, un jugador que sabe defenderse muy bien y que no pierde la oportunidad de contragolpear, aunque la arcilla no sea su superficie preferida. Se espera un gran partido, disputado de poder a poder.
También jugaba ayer el catalán Marcel Granollers que se enfrentaba al francés Monfils, pero la cosa no fue bien para el de Barcelona que cayó 6-2,6-4 y no podrá acceder a las semifinales. Este resultado nos da una semifinal francesa entre Monfils y Tsonga, vencedor ante Federer.
No hay comentarios:
Publicar un comentario