El Almería es un equipo curioso, busca siempre tener el balón aunque después no logra finalizar los ataques y le cuesta marcar goles. Mientras los equipos que luchan por mantenerse y evitar el descenso, saben cerrarse atrás y acumulan jugadores en el centro del campo para impedir que el contrario cree, el equipo andaluz juega a dominar y al final es dominado, para colmo no dispone de una defensa lo suficientemente contundente. Pero lo que no consigue en casa parece lograrlo fuera, ayer en Coruña en el minuto 92 encontró el gol de la victoria que le daba la segunda victoria, las dos fuera de casa.
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