Tras el gran fiasco de la clasificación en la que los Ferrari tan solo pudieron clasificarse en los puestos noveno y décimo y, cuando nadie esperaba una gran actuación de los bólidos rojos, una vez más el piloto asturiano dio todo un recital de pilotaje y logró llegar en segunda posición. Todo comenzó con una gran salida de Alonso que remontó dos posiciones en la recta y otras dos en las primeras curvas, colocándose quinto. En la cabeza el alemán Vettel lograba adelantar a Hamilton en la primera vuelta y no abandonaría la primera posición desde ese momento. Mientras el piloto español seguía en su particular carrera, ayudándose de un bólido que esta vez si parecía lo suficientemente competitivo frente a sus rivales, de hecho tras el primer cambio de neumáticos Fernando logró adelantar al Mercedes de Hamilton, poniéndose en una segunda posición que no abandonaría en el resto de la carrera.
Tan solo Vettel con su Red Bull fue capaz de mantener a Alonso a distancia, el alemán que dispone de un coche superior hizo lo que le gusta, ganar de principio a fin en una lucha contra el reloj, pero donde mostró su calidad de piloto, ya que cuando vio que Alonso se le acercaba y tras la indicación de su equipo impuso un mayor ritmo incrementando vuelta a vuelta la distancia con el de Ferrari.
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