La vuelta de Nadal a la competición eligiendo los torneos sobre tierra, tras siete meses de baja por una rotura parcial de ligamento rotuliano y una hoffitis en la rodilla izquierda, está siendo positiva. Sin embargo, Rafa juega aún con dolor lo que parece impedirle estar en estado óptimo desde le punto de vista físico y tras Acapulco debe decidir si está en condiciones de asaltar el cemento de Norteamérica, los masters 1000 de Indian Wells y Miami, su intención parece que es jugarlos, según declaración de su equipo, pero será en Nueva York, donde jugará un partido de exhibición el lunes en el Madison Square Garden, donde definitivamente diga si participa en estos master 1000. Como ha declarado su tío y entrenador, Toni Nadal, “Su nivel tenístico es bastante bueno, pero jugar a un altísimo nivel sin una movilidad perfecta es complicado”.
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