El primer master mil de la temporada se lo ha llevado Roger
Federer que ha marcado diferencias con sus rivales y que augura una temporada
bastante competida. En semifinales venció a Nadal en dos sets, 6-3 y 6-4, dando
una lección de juego al mallorquín al que no permitió realizar el juego que le
ha permitido tener un balance positivo en los enfrentamientos entre los dos
tenistas. Y en la final logró imponerse al gigante norteamericano Isner que había
vencido a su vez al número uno el serbio Djokovic en tres sets, donde se pudo
ver que Nole no es el mismo jugador que el pasado año.
El partido entre el suizo y el americano no fue tan fácil para
el primero como se preveía, primero porque los saques de éste no permiten
romperle el servicio con facilidad y segundo porque el estadounidense también
sabe golpear la bola, al final la mayor experiencia del helvético le permitió
alzarse con el triunfo por 7-6, 6-3.
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