No es Montecarlo un circuito en el que los coches puedan desarrollar toda su potencia, en este circuito urbano prima la conducción, adelantar es casi imposible y no es difícil proteger la posición. Si a todo esto le unimos la climatología con fuerte lluvia, el piso mojado impone aún mayores dotes de conducción.
La pole la logró el Red Bull de Ricardio, mostrando una gran mejora en las prestaciones de los motores Renault, le seguían los Mercedes de Rosberg y Hamiltton. La salida bajo la lluvia ha sido detrás del coche de seguridad, con neumáticos de lluvia extrema; sin embargo ha parado de caer agua y hasta ha salido el sol, con lo que las estrategias han comenzado a ser fundamentales, Ricardio ha entado demasiado pronto para cambiar neumáticos mientras que Hamiltton se ha mantenido en la pista todo el tiempo posible apurando al máximo las gomas y poniendo tiempo de por medio, aprovechando también que Rosberg tenía algún problema. En la zona media saltaba la sorpresa y el MCLaren de Alonso parecía comportarse colocándose en una quinta posición que aguantaría hasta el final, y Sainz que en un principio había logrado colocarse tercero ha tenido la mala suerte de dos errores de los mecánicos en los cambios de neumáticos que lo han relegado a la octava posición, desde donde no ha podido nada más que aguantar ante la imposiblidad de adelantar.
Al final el podio ha estado formado por Hamiltton, Ricardio y Pérez, seguidos de Vettel y alonso. Rosberg ha entrado a continuación perdiendo parte de la ventaja que sacaba a su compañero en el mundial. Buena e interesante carrera, lo que no es muy normal en la fórmula 1.
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