La semana de Champions finalizó con la sorpresa de la derrota del Real Madrid en Alemania, le había tocado la cenicienta del torneo y sin embargo allí mostró todas sus carencias. Me hacía gracia oir los comentarios de Valdano antes de que marcaran los teutones, el Madrid tiene la pelota y domina con claridad; pero al momento en dos jugadas iniciadas por el lado de Danilo los alemanes marcaron los dos goles con los que lograrían la victoria. Los blancos fueron un equipo sin profundidad, sin mordida y con agujeros en defensa, una sombra de lo que hicieron el fin de semana ante el Barcelona, donde se llevaron la victoria y dieron imagen de peligro. Hoy ante el Eibar los merengues se han dado un respiro marcando cuatro goles, dejando en el banquillo a muchas de las figuras; sin embargo, el partido importante es el que jugaran el martes frente al Wolfsburgo, ese día se juegan la temporada porque perder sería todo un fracaso para una plantilla como la blanca.
En el otro partido de Champions se enfrentaban el Barcelona y el At. de Madrid, los dos primeros de la liga, en un combate fratricida, todo comenzó bien para los colchoneros que marcaron de la mano de Torres, pero muy pronto el árbitro alemán cayó ante las simulaciones de los blaugranas con el resultado de la expulsión del niño, dejando al atlético con diez jugadores y cargándose el partido. Es curioso que en los dos últimos partidos los contrincantes del Barcelona se hayan quedado con diez jugadores, a mi no me sorprende cuando veo lo bien que teatralizan Neymar, Suárez, Busquet, Alba, Messi...
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