Nico Rosberg ha ganado el Gran Premio de Australia demostrando que las escuderias con motor Mercedes actualmente son superiores a las demás. Baste con echar un ojo al resultado final de la carrera y ver como han quedado estos coches, ahora mismo tras la descalificación de Riccardo por usar más combustible del permitido nos encontramos con que los tres primeros están equipados con el propulsor alemán. Rosberg, Magnussen y Button, estos últimos con McLaren-Mercedes. El cuarto puesto ha sido para Ferrari de la mano de Alonso, mientras Raikkonen ha entrado en séptima posición.
La carrera ha sido bastante movida, ya en la primera curva el japonés Kobayashi se llevaba por delante a Massa, teniendo que abandonar los dos la carrera. Posteriormente los abandonos se han multiplicado, a destacar los del campeón actual Vettel, al que no le andaba el coche y, la del inglés Hamiltton que salía desde la pole pero que por fallo mecánico ha tenido que decir adiós.
Los motores Renault aún no están optimizados y los coches que los montan lo notan, a ello hay que añadir que los nuevos dispositivos electrónicos no funcionan correctamente, y son difíciles de manejar, los pilotos parece que tienen entre manos un panel de un avión de combate. Esperemos que conforme avance la temporada los técnicos logren dominar y optimizar las nuevas mecánicas y electrónicas.
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