Lo que todo era esperanza se convirtió en un nuevo fiasco para Ferrari, en una carrera loca donde la táctica primero y la suerte después no estuvieron de cara. La lluvia obligó a una salida tras el coche de seguridad, las posiciones no cambiaban y todos sin excepción iban con los neumáticos de lluvia, pero claro alguien en Ferrari decidió jugársela y lo consiguió, llamaron a Fernando a boxes y le pusieron neumáticos intermedios, y que sucedió pues lo peor que se puso a llover tan fuerte que el coche de seguridad salio de nuevo y teórica ventaja de Alonso se quedó en nada, hala del segundo al octavo puesto y de nuevo a entrar a cambiar neumáticos. Después paralización de la carrera por la lluvia y reanudación cuando la pista estuviera lista, y que pasó, pues que Buton y Alonso se rozaron, el español dio un trompo y su coche se quedo atrapado en la cuneta, con lo que fin de la carrera, y al inglés que le ocurrió, pues nada que siguió su camino y ganó la carrera batiendo a Vettel en la última vuelta.
Mucho han de cambiar las cosas en Ferrari si se quiere hacer algo digno, de Massa no hablo porque el solo es capaz de perjudicarse, pero de los técnicos de carrera y del encargado de la metereología habría que comentar muchas cosas, y ojo no es la primera vez que con previsión de lluvia hacen todo lo contrario que el resto y así les fue y así les va.
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