Al final la cosa no ha ido mal, así si por la mañana a pesar de una carrera demencial Alonso fue capaz de sobreponerse a la climatología y a las sanciones para realizar una esplendida remontada y acabando cuarto.
A mediodía en el duelo español Nadal superó a Fer, que se enfrentaba no solo a un amigo que le había vencido siempre sino también a las ansias de Rafa de lograr por fin un nuevo triunfo y dando así por zanjada una asignatura, el triunfo, que este año se le estaba poniendo cuesta arriba. Su sufrimiento se puso de manifiesto al terminar el partido, ya sentado escondió la cara entre sus manos y lloró sacando todo lo que llevaba dentro. En el otro lado, Verdasco aunque estaba feliz por su primera final se le notaba poco satisfecho con el partido que había jugado; no obstante debe pensar que es un primer paso para seguir conquistando posiciones y no olvidar el gran partido de semifinales ante el número dos del mundo.
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