Al final no pudo ser, David Ferrer no pudo con un gran Andy Murray, aunque comenzó ganando el primer set el escocés fue capaz de sobreponerse y en un magnífico partido venció al español.
Dicen que Murray es un jugador irregular, que siempre cae en lagunas que le han impedido ganar un grand slam; sin embargo, no hay duda de que es uno de los grandes del circuito, capaz de ganarle a cualquiera. Hoy ha mostrado su gran calidad, ante un Ferrer que venía de ganar con cierta facilidad al argentino Del Potro, y que parecía encontrarse cada vez mejor sobre la hierba. El alicantino ha tenido el partido de cara, ha roto el servicio de su oponente en cada uno de los sets y ha servido para ganar el segundo set, aunque en ese momento ha aparecido el gran Murray, frío como el hielo cuando ha tenido que solventar las bolas de break, insuperable en los intercambios defendiéndose panza arriba y contraatacando siempre, colocando bolas imposibles a las que el gran David no ha podido llegar, pero es que además el británico ha superado en físico a nuestro compatriota.
Nada que decir, Ferrer lo ha dado todo, pero enfrente ha tenido a uno de los mejores jugadores del mundo.
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